sábado, 28 de diciembre de 2013

Gregorio Morán: Los padres de la Transición eran absolutamente impresentables. la Transición fue un negocio fabuloso. Lo que pasa ahora es que la empresa ha quebrado, pero entonces fue un gran negocio. La Transición es una operación que se realiza entre muy pocas personas. Unos ganan más que otros, pero todos ganan

   *Entonces Suárez no dimite, sino que lo hacen dimitir. ¿Es así?
    Absolutamente. Entre la derecha, el ejército y el Rey, se lo cargan.
    *La historia de que los generales le ponen a Suárez las pistolas encima de la mesa ¿es verdad o una leyenda?
    Es verdad, pero no literalmente. No hay pistolas. No es exactamente así. Eso de las pistolas forma parte del guión tipo Hollywood de la Transición. Se celebra una comida en el Palacio de la Zarzuela. Adolfo Suárez no sabe que se va a celebrar. El Rey lo invita a última hora y se encuentra allí con la cúpula militar. Suárez se mosquea mucho. En un momento dado el Rey se levanta y dice: voy un momento al lavabo. Y los deja solos. A los militares y a Suárez. Entonces los militares le dicen que no están dispuestos a consentir que la cosa continúe así. En ese momento sí hay alguno que hace metáforas con la palabra pistola. Pero no llegan a sacarlas, no era necesario. Hubiera sido algo absurdo. Hay que decir —haciendo un inciso— que Suárez tiene tropecientos defectos, pero hay que reconocerle algo que demostró siempre: una valentía inigualable. Muy superior a la de esos mando militares. Si es algo referente a la inteligencia o al talento, se le puede cuestionar. Pero la cuestión testicular la tenía muy bien colocada. Cuando el Rey volvió, la cena continuó. Pero Suárez tenía ya bastante claro que había llegado a un punto de no retorno....[...]

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